Hoy toca variar y dejarse un poco de chocolate. Algunos me diréis:
pero...!si son tartaletas de chocolate blanco! Entonces viene cuando yo
respondo: técnicamente, el chocolate blanco no es chocolate ergo no me podéis
culpar de que os bombardeo con cacao! :D
Estas tartaletas son muy sencillas de preparar y lo mejor es que
el relleno no requiere horneado, solo unas 3 horitas de paciencia para que se
asiente!
La base es una especie de masa quebrada casera, que me quedó todo
lo opuesto a bonita, pero al menos cumple con su función de base sólida. De
todos modos, la próxima vez que las prepare quizá hago una base de galletas o,
si no, en el súper venden unas masas quebradas increíbles que seguro que no me
quedan con forma de churro en vez de tartaleta.
Vamos a ello!
INGREDIENTES
Para la masa:
- 250 gr. de harina
- 3 cucharadas de azúcar
- 125 gr. de mantequilla fría
- 1 huevo L
Para el relleno:
- 200 gr. de chocolate blanco
- 450 gr. de queso mascarpone
- 150 ml. de nata (puse del 18% de MG)
Para la decoración:
- Fresas
- Azúcar glas
- Unas hojitas de menta
Primero precalentamos el horno a 200º.
Para hacer la masa, ponemos en un bol la harina, la mantequilla cortada a daditos y el azúcar, y vamos mezclando hasta que nos quede una apariencia como de migas de pan. A continuación, añadimos el huevo y amasamos hasta que quede todo perfectamente integrado y se forme una bola.
Extendemos la masa y forramos con ella los moldes (yo usé 4 tartaletas medianitas, en la foto solo véis 3 porque... sí, lo admito... la otra me la comía antes de la sesión fotográfica de turno). Dejamos reposar unos 20 minutos.
Pasado el tiempo de reposo, cubrimos los moldes con papel de hornear y le ponemos un peso encima (las típicas legumbres crudas de toda la vida van estupendas). Horneamos con el papel 10 minutos y después lo retiramos y horneamos 5 minutos más. Dejamos enfriar.
Para el relleno, calentamos al baño maría el chocolate blanco y 125 gramos de mascarpone y removemos. Cuando esté todo derretido e integrado, lo apartamos y le añadimos el mascarpone restante, batiendo con ganas hasta que nos quede una masa de esas que dan ganas de comérsela a cucharadas. Finalmente, echamos la nata líquida y le damos a la batidora por última vez.
Vertemos la mezcla en los moldes y.... ahora es cuando toca esperar. Mientras esperáis, podéis escuchar muy convenientemente esta canción: "The Waiting"
Una vez nos hayamos hecho el cuerpo que "the waiting is the hardest part", ya habrán pasado las tres horitas de rigor para que la consistencia de las tartaletas sea blanda, pero suficientemente cuajada.
Como decoración, le puse unas cuantas fresas con un arte más que discutible, unas hojitas de menta y un poquito de azúcar glas.
Y a comer! Que aproveche!
A mi me sobró un poco de masa, por lo que aproveché para poner a prueba mi creatividad y hacerle esto a mi hermana (quién, por suerte, a pesar de regalarle esto, me sigue queriendo! jajaja)
Fuente: "El libro de cocina" (Blume)
Ah, antes de que se me olvide… alguien
me podría decir si se ve mi índice de recetas? Es que el otro día no podía ver
el listado… En caso de que la respuesta sea negativa, que es lo que me temo…Sabéis
como leches se hace para que se vea? Esto de blogger me trae loca! :(
Ya puestos a pedir… también me
gustaría cambiar el diseño… poner una cabecera bonita y hacer que las fotos se
viesen más grandes, por ejemplo. A aquellos ases de la informática que tengan
un minutito libre… os agradeceré eternamente un breve tutorial, que será
compensado con miles de pastelitos virtuales! :D
Como siempre, que tengás feliz semana. A mí lo que me da feliz semana son vuestros comentarios, sois estupend@s! :)
pd: acabo de llegar del Fòrum Gastronòmic de Girona y tengo que ponerme a escribir la crónica para mañana pero prometo que en cuanto acabe este tute me paso por vuestros blogs!
pd: acabo de llegar del Fòrum Gastronòmic de Girona y tengo que ponerme a escribir la crónica para mañana pero prometo que en cuanto acabe este tute me paso por vuestros blogs!